domingo, 24 de marzo de 2013

5 discos que ustedes odiaran ... y que yo adoro!!!


Tras la polémica con el “caso Wilco” muchos pensaban que las hachas de guerra estaban enterradas en el seno de la redacción. Pero nada más lejos de la realidad!!!! En la guerra uno tiene dos opciones: recular como un cobarde y sobrevivir, o dar un valiente salto hacia delante …. Y meterse una buena hostia. Yo he decidido coger la segunda opción y espero recibir en breve la llamada del redactor jefe invitándome a su despacho …. De donde sospecho que no saldré indemne. Vamos, que en estos momentos estoy a punto de declarar mi homosexualidad en medio de un concierto de Ted Nugent. Pero es lo que hay. Nunca está de más enfadar a unas cuantas mentes cerradas. Aquí van: cinco discos que ustedes odiaran y yo adoro. Enjoy!



             Massive Attack “Mezanine”

¿El mejor disco de trip hop de la historia? Sí. Rotundmente sí. Una obra de arte en la que el grupo abandonaba sus influencias del soul y del jazz para centrarse en sonidos más oscuros y dar entrada a potentes guitarrazos. Para entendernos, este es el primo británico de “The Fragile” de Nine INch Nails. De hecho Trent Reznor es fan … y Robert Plant, Bowie, Gregg Dulli o Dave Wyndorf, entre muchos otros rockeros de pro.
                Al igual que ocurre con los discos de Pink Floyd o con las películas de David Lynch, este es un álbum perfecto para escuchar a solas, a oscuras y preferiblemente con algo de bebida o de “fumeque” bien cerca para poder disfrutar de su maravillosa producción que daba cabida a guitarras asfixiantes, melodías retorcidas, sonidos inquietantes, bases hipnóticas y un aura de oscuridad y misterio pocas veces reproducidos en un álbum. Deliciosamente retorcido. 




            Van Morrison “Astral weeks”

Jamás he entendido la fobia que sienten los popuheads hacia este disco. Van Morrison es un gilipollas (también lo son Axl o Vince Neil) pero este disco es pura gloria. Su peso en la historia del Rock es incuestionable (revistas como Mojo o la Rolling Stone clásica lo han colocado entre los 10 primeros puestos de sus listas de mejores discos de la historia) y sólo un sordo podría no apreciar su carácter rompedor, ya que éste fue uno de los primeros discos en fusionar el R&B con soul, folk y pinceladas jazzisticas, algo que hoy nos suena común pero que en su momento significo derribar muchas barreras y prejuicios. De hecho el lanzamiento fue un estrepitoso fracaso en ventas y la larga y laboriosa carrera del músico fueron lo único que pudieron hacer que este álbum no quedase en el más completo olvido.


La principal clave del álbum estaba en las interpretaciones del norirlandes. Con sólo 23 años se metía en el estudio dispuesto a hacer algo que iba a repetir rara vez posteriormente: mostrarse inocente y desnudo, otorgándole a las canciones una aura de magia y misterio estremecedor. Para saborear tranquilamente.  





            Suede “Coming Up”

Cualquiera de los tres primeros discos de Suede me parece una colosal obra de arte pero escojo este “Coming up” porque contiene mi canción favorita de los ingleses: Trash.
                Respetados por parte de la prensa rockera el gran problema mediático de esta banda fue aparecer a principios de los 90 en medio de toda la explosión americana de bandas que cada mes bombardeaban nuestros adolescentes tímpanos. Además Suede eran británicos. Jodidamente británicos. Incluso me atrevería a decir que eran más británicos que el té de las 5 o los gin tonics de la Reina Madre. De hecho sus influencias son 100% british (Bowie, T Rex, The Beatles, Roxy Music, The Smiths …) y no aceptaron ningún rastro de sonido americano, algo que les habría beneficiado quitándoles parte del dramatismo que desprendían su música.
                El número de composiciones perfectas que hicieron durante sus primeros años es tremendamente enorme poniendo la banda sonora perfecta a miles de urbanitas europeos (el grupo nunca se comió un colín en Estados Unidos … ¿alguien se imagina a un redneck de Arkansas escuchando las composciones de Brett Anderson?): Beatiful ones, Animal nitrate, Lazy, So Young, The wild ones … Junto a P.J. Harvey lo mejor que exportaron las islas británicas en los primeros 90. Aunque ahora que lo pienso también fue lo único.


                Andrés Calamaro “Honestidad brutal”

             El disco más debatido de la historia del rock español (o mejor dicho “en español”). Por un lado unos no lo soportan cuestionando la credibilidad del autor y viéndolo como un fantoche. Por otro lado otros muchos entienden la figura de Calamaro como un pilar de su existencia, magnificando la grabación de esta exigente obra. Ni lo uno ni lo otro. Honestidad brutal es un álbum repleto de grandes canciones y enormes letras. Por otro lado la farlopa y el desmesurado ego de Andrés alargaron el álbum más de lo necesario añadiendo algún tema que restaba coherencia al conjunto (¿era necesario dedicarle una canción a Maradona?), además de extender el minutaje hasta las casi tres horas.
                De todas formas la balanza se decantaba por el lado del éxito y el argentino hacía las mejores canciones  de su carrera: “Paloma”, “Te quiero”, “La parte de adelante”, “Socio de la soledad”, “Negrita”, “Los aviones”, “El día de la mujer mundial”, “Más duele” … ufff!!!! demasiadas y demasiado buenas.
                En el doble compacto quedaba perfectamente reflejado el estado existencial de un artista peculiar en un momento único. Recién divorciado decidió encerrarse en el estudio de grabación con una tonelada de cocaína no saliendo hasta muchos meses después para viajar  a estudios de Nueva York, Londres y Madrid, y hacer grabaciones adicionales con músicos de la talla de Marc Ribot. De hecho, se comenta que el disco costó más de un millón de euros de grabar … sin contar las drogas.




                   Public Enemy “Fear of a black planet”

                “It takes a nation of million to hold us back” es considerado unánimemente como el mejor álbum de Public Enemy. Su potente sonido y su crudeza, lo acercan a lo que se puede considerar “sonido rock”. Pero para mi la cima creativa de la banda fue este enorme “Fear of a black planet”. En él el grupo mantenía la agresividad pero se decantaba por su vertiente más bailable y no renunciaba a impregnar todos los temas (perdón temazos) de potentes ritmos funkys y de trepidantes bases rítmicas … Orgullosos del legado de James Brown, Sly & The Family Stone o Funkadelic, devolvían la música negra a los barrios. Todos adoramos a Prince y a Terence, pero la mala hostia que hay en este álbum lo convertía directamente en el mejor disco de música negra de la época. ¿Rage against the machine? ¿Red Hot CHilli Peppers? Escuchando barbaridades como “Burn Hollywood burn” o “911 is a joke” los alumnos parecen niños de papá. Un disco imprescindible de cuando el rap “era la CNNd e los negros y no el canal Disney” Chuck D dixit.





4 comentarios:

  1. Tripi, además de ser un caudal de conocimiento, de la manera que escribes se puede deducir que eres un tío cojonudo.

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  2. Muchas gracias Tripi por redescubrirme discos que hacía siglos que no escuchaba.
    Marcarme la senda que llevaba unos meses perdida.
    Wow!! Llevo dos días en una nube!!!
    Joder! Gracias a tu prosa he sentido una necesidad extrema de escuchar al 11 el "Dr. Feelgood" de Motley Crue y el "Lit it Up" de Buckcherry!!
    "I love the cocaine!! I love the cocaine!!!"
    Life could be wonderful!!

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  3. Me encanta leerte...
    Pero, si te soy sincero, después de ese titulo tan cachondo me he sentido un poco decepcionado. Tripi, busca en tu interior, no tengas miedo a lo que pensemos y siéntete libre para contarnos tus secretos verdaderamente inconfesables...Seguro que tienes discos por ahí que te pueden hacer sonrojar de verdad, y no me refiero a Wilco!!! jajajaj

    Calamaro, Public Enemic? quien no valoraría a estos tipos? Calamaro es uno de los grandes del rock en castellano y punto. Los negrazos de Public Enemic son historia de la música. Suede siempre me parecieron una gran banda y al igual que Maniac Street Preachers muy diferentes a todos los grupitos Britpop de la época.
    Lo de Van Morrison, para serte sincero, me lo imaginaba!!! siempre te he imaginado escuchándolo!!! En cambio lo de Massive Atack me ha dejado completamente descolocado!!! Lo mismo me paso cuando el protagonista de Alta Fidelidad, incluía una cancion de ellos entre sus Top Five. Pero si a gente como Dave Wyndford o Greg Dulli le molan, me haré con el sin pensarlo...

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  4. Un saludo,,,soy nuevo en este blog que me parece muy interesante.
    Sin duda el de Calamaro es uno de esos discos que la historia pondrá en un pedestal cuando pasen los años,,,una obra mastodóntica.

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